Por qué los tiburones que merodean esta isla del Pacífico crecen más de lo normal, según la ciencia
Cerca de Norfolk, en el Pacífico Sur, los tiburones tigre son unos dos metros más grandes que la media. En el Día Internacional de Concienciación sobre los Tiburones, que se celebra el 14 de julio, descubre más sobre este misterio.

Tiburones tigre patrullan las aguas azules y abiertas de la Gran Barrera de Coral.
El agua se agitaba mientras dos tiburones tigre destrozaban el cadáver de una vaca. Poco a poco, más depredadores gigantes se unieron al frenesí alimenticio, hasta que unos 20 rodearon a Charlie Huveneers mientras observaba desde el interior de una jaula para tiburones.
El tiburón tigre, llamado así por sus rayas negras, está emparentado con el gran tiburón blanco y suele medir unos tres metros. Pero aquí, en este remoto rincón del Pacífico Sur, estos peces alcanzan habitualmente (y misteriosamente) longitudes de cuatro metros y medio.
Ese día, Huveneers y Lauren Meyer, ambos biólogos de la Universidad Flinders de Australia, y Adam Barnett, de la Universidad James Cook, quedaron impresionados por el tamaño de los tiburones.
“Era la mayor cantidad de tiburones tigre que habíamos capturado en un solo día y eran los machos y las hembras más grandes que habíamos visto nunca”, recuerda Meyer.
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Durante los días siguientes, el equipo capturó 20 tiburones más, que estudiaron y midieron. “Superó todas nuestras expectativas”, reconoce.
Los científicos se encontraban en la Isla Norfolk para estudiar por qué esta remota isla atrae a tantos tiburones tigre, la mayor concentración conocida de esta especie en el mundo. Su misión también era crucial para la conservación: estos gigantes oceánicos están al borde de la extinción, debido principalmente a la sobrepesca.
La Isla Norfolk, territorio de Australia, es una antigua colonia penal con una larga historia ganadera. Como no hay una buena forma de deshacerse del ganado muerto sin contaminar las aguas subterráneas, los ganaderos suelen tirar los despojos directamente al océano.
Al principio, el equipo pensó que estos tiburones gigantes podrían estar merodeando por la isla para aprovechar este “restaurante de hamburguesas con autoservicio”, como dice Meyer.
Pero lo que encontraron fue aún más misterioso.

Estos tiburones tigre que se alimentaban del cadáver de una vaca muerta frente a la costa de la Isla Norfolk, en Australia, eran excepcionalmente grandes. Los investigadores se preguntaron si su extraña dieta podría explicar su enorme tamaño.
Qué comen los tiburones tigre de la Isla Norfolk
Los expertos comenzaron a investigar la dieta de los tiburones para ver si los cadáveres de las vacas eran lo que los mantenía allí. “Se necesita algo especial para poder mantener a tantos tiburones grandes”, asegura Huveneers.
El análisis de isótopos estables, que consiste en analizar los átomos de diversos elementos para ver qué comían los animales, reveló una sorpresa: solo el 10 % de la dieta de los tiburones estaba compuesta por vaca. “Es una cantidad minúscula en comparación con lo que esperábamos”, señala Huveneers.
Eso dejó claro que los peces tenían otra fuente de alimento clave: “Esta enorme población de grandes tiburones tigre necesitará mucho más que comer que los restos ocasionales de vacas”, afirma Meyer.
Entonces, ¿qué comían? El análisis reveló que la isla es más un restaurante de pollo que una hamburguesería: el 52 % de la dieta de los tiburones estaba compuesta por aves marinas. Al final, “los despojos eran solo un pequeño postre para ellos”, sostiene.
Los científicos ya sabían que los tiburones tigre comen aves, pero los investigadores se sorprendieron tanto por la cantidad presente en la dieta de los tiburones de Norfolk que tuvieron que volver a comprobar sus datos.
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Adam Barnett y sus colegas utilizaron una cámara oculta con forma de pájaro (apodada “Shaza”, en la imagen) para investigar si los tiburones tigre que habitan alrededor de la Isla Norfolk se alimentan de aves.
Los tiburones tigre son cazadores lentos
Las pardelas del Pacífico acuden en masa a la Isla Norfolk para anidar.
Al atardecer, estas aves marinas flotan en la superficie del agua en grandes “balsas”, lo que las convierte en presas fáciles. “Sería muy difícil para las aves detectar a un depredador que se acerca por debajo, especialmente a esta hora del día”, detalla Meyer.
Los grandes tiburones tigre son cazadores bastante lentos y oportunistas, que se basan principalmente en el factor sorpresa. “El comportamiento de las aves marinas al atardecer es la oportunidad perfecta para que los tiburones se acerquen y utilicen sus grandes narices planas para succionar a estas aves de la superficie”.
Sophia Emmons, estudiante de doctorado de la Universidad James Cook y la Universidad del Sur de Florida, está de acuerdo en que las aves marinas son una comida perfecta.
Aunque los tiburones tigre “parecen estar diseñados para ser los depredadores más poderosos (tienen un cuerpo aerodinámico, una fuerza mandibular increíble y son capaces de romper el caparazón de las tortugas…), son muy perezosos”, asegura Emmons, que no participó en la investigación.
A veces conocidos como los “cubos de basura del mar”, estos carroñeros han sido encontrados con animales de granja, matrículas e incluso una armadura en el estómago.
Con una oferta tan abundante de aves marinas para alimentarse, a Emmons le parece lógico que los tiburones tigre de la Isla Norfolk crezcan mucho más que otras poblaciones.
“Con una fuente de alimento tan buena, ya sea principalmente del ganado o de las aves marinas, los tiburones tigre pueden gastar más energía y dedicar más de ella al crecimiento”, explica.
Emmons también se pregunta si existe una conexión secundaria entre el ganado y los tiburones. “¿El ganado atrae a los peces, los peces atraen a las aves y las aves atraen a los tiburones?”, se pregunta.
Huveneers y el equipo creen que eso es poco probable, en parte porque los tiburones no permanecen en la Isla Norfolk durante todo el año.

Lauren Meyer y Charlie Huveneers están estudiando la población de tiburones tigre alrededor de la Isla Norfolk.
Por qué migran los tiburones tigre
En otro giro inesperado, el equipo descubrió que estos tiburones tigre solo permanecen cerca de la Isla Norfolk durante cinco meses, entre la primavera y el verano. “Es sorprendente, teniendo en cuenta que podría haber suficiente comida para ellos durante todo el año”, dice Huveneers.
Los animales marcados han revelado que muchos de los tiburones tigre de la Isla Norfolk migran 965 kilómetros hasta Nueva Caledonia, un territorio francés, en otoño. Pero, aunque había un patrón constante en la migración de los tiburones entre la Isla Norfolk y Nueva Caledonia, sus rutas variaban enormemente.
“Algunos se dirigían a Australia, Fiyi, Vanuatu, casi hasta Nueva Zelanda y Papúa Nueva Guinea”, menciona Huveneers.
Ahora que los científicos saben adónde se dirigen estos enormes tiburones, quieren averiguar por qué. Una teoría es que los tiburones se aparean cerca de la Isla Norfolk y dan a luz en las aguas de Nueva Caledonia, que se encuentra en mar abierto, lejos de muchos depredadores.
“Los tiburones tigre recién nacidos son muy vulnerables”, explica Meyer, “por lo que las crías deben ser depositadas en los lugares más adecuados para maximizar sus posibilidades de supervivencia”.

Los científicos han seguido la pista a los tiburones tigre gigantes que frecuentan la Isla Norfolk a cientos de kilómetros de Nueva Caledonia (en la imagen), lo que sugiere que los animales migran en otoño.
En busca de una guardería para los tiburones tigre
Si la Isla Norfolk es un lugar de reproducción, las hembras podrían estar engordando con aves marinas antes de dar a luz a sus crías en las cálidas aguas tropicales de Nueva Caledonia.
Sin embargo, ninguna de las ecografías que el equipo realizó a los tiburones de la Isla Norfolk reveló la presencia de crías. Del mismo modo, estas hembras no presentaban cicatrices de apareamiento.
Aunque el equipo identificó una hembra preñada en Nueva Caledonia (“pudimos sentir las crías en el vientre”, afirma Meyer), la guardería seguía siendo un misterio.
Si las investigaciones futuras identifican zonas de cría, estas áreas podrían protegerse, lo que supondría un paso fundamental para proteger a esta especie en declive.
Por ahora, el misterio de por qué estos enormes tiburones se sienten atraídos por la Isla Norfolk y Nueva Caledonia sigue sin resolverse, dice Huveneers: “Nos estamos acercando a la respuesta, pero ciertamente no es algo seguro”.
