Estudiantes en un laboratorio biológico de la Universidad de Wageningen, Países Bajos. Las mujeres se encuentran ...

Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia en números: cuál es la situación de las científicas en la actualidad

Los datos revelan que las investigadoras publican menos y son peor remuneradas. Estas son las estadísticas que lo demuestran.

Estudiantes en un laboratorio biológico de la Universidad de Wageningen, Países Bajos. Las mujeres se encuentran subrepresentadas en los niveles más altos de las carreras profesionales.

Fotografía de Luca Locatelli
Por Redacción National Geographic
Publicado 9 feb 2024, 12:04 GMT-3

A pesar de que los ámbitos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés) se consideran fundamentales para las economías nacionales y que las mujeres son clave para la comunidad científica y tecnológica, la mayoría de los países, independientemente de su nivel de desarrollo, no han alcanzado la igualdad de género en este sector.

La información proviene de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que también advierte que a nivel mundial solo 1 de cada 3 investigadores son mujeres.

Para reconocer su rol clave en la comunidad científica y tecnológica y promover su acceso a la educación, la capacitación y la investigación, el organismo internacional instituyó el 11 de febrero como el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia.

En general, las mujeres en los campos STEM publican menos, reciben menores salarios por su investigación y no progresan tan lejos como los hombres en sus carreras, reconoce el Instituto de Estadística de la Unesco (UIS, por sus siglas en inglés).

En ocasión del Día Internacional, accede a las estadísticas que demuestran esta situación.

Las mujeres corren el riesgo de perderse los empleos del futuro

“El mundo está experimentando una transformación fundamental que está cambiando nuestra forma de vivir, trabajar y pensar”, reconoce un informe sobre la ciencia publicado en 2021 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés).

Las implicancias de esa transformación tienen gran alcance e impactan en diferentes áreas: desde los efectos del cambio climático que obligan a replantearse el enfoque de desarrollo actual hasta la irrupción de la inteligencia artificial (IA) en diversos campos. 

Por lo tanto, se sabe que, a medida que se vayan automatizando los empleos poco cualificados, el mercado de trabajo exigirá cada vez más un mayor nivel de formación y competencias. Las mujeres enfrentan un escenario complicado en este sentido y corren un serio riesgo de perderse los trabajos del futuro.

Según un estudio colaborativo de 29 programas de las Naciones Unidas, la mitad de los empleos actuales habrán desaparecido en 2050 y las mujeres serán las más perjudicadas por el cambio: se estima que perderán 5 empleos por cada 1 ganado gracias a la Industria 4.0, frente a la pérdida de 3 empleos por cada 1 ganado por parte de los hombres.

Para 2018 se había logrado la paridad numérica en ciencias de la vida en muchos países, pero la proporción de doctoras en ingeniería no superaba el 30 %. En la fotografía, una estudiante de la Tecnicatura en Laboratorio utiliza un microscopio en un centro de salud de Mogadiscio, la capital de Somalia.

Fotografía de Rice UN Photo

Las mujeres tienden a ser una minoría en el mercado laboral digital

Datos de 2018 compartidos por la Unesco demuestran que, para ese año, las mujeres solo representaban un tercio (33 %) de los investigadores del mundo. Si bien para ese entonces habían logrado la paridad numérica en ciencias de la vida en muchos países, su proporción entre los doctores en ingeniería y en informática solamente ascendía a un 28 % y un 40 %, respectivamente.

Un sector crítico es el de la IA, que está creciendo a niveles acelerados, explica el informe. Tal es así, que en dos años (entre 2015 y 2017) el número de trabajadores en todo el mundo con habilidades en la temática aumentó en un 190 %, según el Foro Económico Mundial.

No obstante, la presencia femenina es minoritaria en esta disciplina. Según la misma información de la agencia de la ONU, para 2018 las mujeres solamente representaban un 22% de los profesionales que trabajaban en inteligencia artificial, a nivel mundial.

“Esta brecha es visible en los 20 países con mayor concentración de empleados de IA y es particularmente evidente en Argentina, Brasil, Alemania, México y Polonia”.

Sumado a lo anterior, el organismo refleja que las mujeres siguen siendo minoritarias en los puestos técnicos y directivos de las empresas tecnológicas. Además, tienen más probabilidades que los hombres de abandonar el campo tecnológico. Las razones más comunes esgrimidas tienen que ver con las condiciones laborales, la falta de acceso a roles creativos clave y una sensación de “sentirse estancadas en sus carreras”, menciona el reporte de 2021.

Si bien las principales empresas multinacionales de tecnología están logrando avances, todavía están lejos de cerrar la brecha de género en los roles técnicos y de liderazgo. Un ejemplo concreto es que, en el mundo empresarial, solo 1 de cada 4 investigadores es mujer.

A eso se suma que, cuando las mujeres crean sus propias empresas, tienen serios problemas para obtener financiación. “En 2019, solamente un 2 % del capital de riesgo iba a parar directamente a empresas fundadas por mujeres”.

Cuáles son los países con mayor cantidad de científicas

América Latina y el Caribe es una de las dos regiones (junto con Asia central) que han alcanzado la paridad en la proporción de hombres y mujeres investigadores. Aquí, el 45 % del total de los investigadores son mujeres, mientras que el promedio mundial arroja que representan menos del 30 % a nivel global, según datos del UIS.

Pese a ello, las mujeres aún se encuentran subrepresentadas en los niveles más altos de las carreras profesionales y continúan siendo una minoría en muchos campos de las STEM en casi todos los países de la región, advierte un artículo informativo de ONU-Mujeres de 2022.

De hecho, agrega la Unesco, en el mundo académico las investigadoras suelen tener carreras más cortas y peor remuneradas y sus trabajos están infrarrepresentados en las revistas de alto nivel. Al respecto, un análisis de casi 3 millones de artículos sobre informática publicados en Estados Unidos entre 1970 y 2018 concluyó que la paridad de género no se alcanzaría en este campo hasta el año 2100.

De acuerdo con una hoja informativa del UIS que presenta los datos más recientes sobre investigación y desarrollo experimental disponibles a junio de 2019, los países de la región con mayor cantidad de investigadoras son: Venezuela (con un 61.4 %), Guatemala (53 %) y Argentina (52 %), seguido de Panamá (51.8 %), Trinidad y Tobago (49.8 %), Cuba (49 %), Paraguay (48.9 %), y Uruguay (48.3 %).

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    Una científica utiliza tinte para revelar impurezas químicas en diversos materiales. Las mujeres han realizado (y continúan haciendo) importantes aportes a la ciencia. Sin embargo, la mayoría de los países no han alcanzado la igualdad de género en este sector.

    Fotografía de Willard Culver

    En Latinoamérica hay más investigadoras, pero publican menos

    En todo el mundo, las mujeres científicas publican menos que sus homólogos masculinos y la situación es similar en Latinoamérica y el Caribe (LAC), aunque en toda la región su participación en la producción científica es heterogénea, indica el documento Una ecuación desequilibrada: aumentar la participación de las mujeres en STEM en LAC publicado en 2022 por la Unesco con el apoyo del Consejo Británico.

    Específicamente, la proporción de artículos científicos que incluyen la participación de al menos una autora va desde el 43 % en El Salvador hasta el 72 % en Brasil. Seguido de Brasil, los países que encabezan la lista son Argentina (67 %) y Guatemala (66 %), mientras que los países en los que la proporción está por debajo del 51 % son Nicaragua, Chile, Bolivia, Ecuador, Costa Rica, República Dominicana y Honduras.

    A eso se le suma que las mujeres tienen menos probabilidades que los hombres de ser primeras o últimas autoras (los puestos de autoría más prestigiosos), las publicaciones con firma femenina reciben menos citas, y el porcentaje de mujeres que figuran como primeras y últimas autoras se asocia negativamente con el factor de impacto de una revista. “En otras palabras, a mayor factor de impacto, menor presencia femenina”, explica el documento antes mencionado.

    Latinoamérica tiene mucho por hacer para incluir a las mujeres en la ciencia

    Ese reporte de 2022 concluye que Latinoamérica y el Caribe ha experimentado mejoras significativas en cuanto a la inclusión de las mujeres en STEM y reconoce que gran parte de los países de la región ha emprendido políticas para mejorar el escenario, como leyes y planes de igualdad e iniciativas STEM a nivel universitario, entre otras.

    A pesar de estos avances, la región sigue presentando un contexto muy variado en cuanto a la adopción de las STEM por parte de las mujeres y las niñas, y siguen existiendo brechas y barreras en las distintas etapas del ciclo vital como consecuencia de diferentes variables

    Algunas de esas variables son los estereotipos y las ideas erróneas que se propagan en las familias y a través de los profesores; la falta de pedagogías, herramientas e infraestructuras de STEM con perspectiva de género; y la pobreza, que afecta más a las mujeres y a las niñas que a la población general.

    Por lo tanto, los autores del documento recomiendan trabajar sobre esos factores para poder potenciar la presencia de las niñas y las mujeres en la ciencia y contar con sus invaluables aportes.

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