¿Sabrás distinguir a estos 3 animales parecidos a serpientes?
Las cecilias son anfibios que se asemejan a las serpientes por su condición física. Miden cerca de 50 centímetros de largo y no tiene extremidades.
En los rincones más remotos del planeta Tierra, la naturaleza no para de sorprender con su diversidad faunística. Entre estas criaturas se encuentran el lución, la cecilia y la lagartija topo mexicana.
Aunque pertenecen a grupos taxonómicos diferentes, comparten la peculiaridad de ser parecidos a las serpientes y a menudo se los confunde con ellas.
En este artículo, National Geographic hace una radiografía de estos animales y sus características.
1. Lución: el lagarto sin patas y excavador
El lución (Anguis fragilis) es un lagarto sin patas, de cuerpo liso y alargado, lo que puede despistar a los observadores por su semejanza con las serpientes.
Los adultos suelen tener un color marrón grisáceo a cobrizo, mientras que los juveniles exhiben tonalidades doradas pálidas o plateadas con lados oscuros y coloración ventral, describe Animal Diversity Web (ADW), una base de datos en línea sobre historia natural de la Universidad de Michigan (Estados Unidos).
Las hembras presentan rayas oscuras en la espalda y los lados del cuerpo, mientras que los machos pueden caracterizarse, en ocasiones, por manchas azules distintivas en su superficie dorsal.
Entre sus depredadores se encuentran serpientes y aves rapaces. Cuando se sienten amenazados, pueden autonomizar su cola como estrategia defensiva. Aunque la cola se regenera, la nueva estructura carece del color original, señala ADW.
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El lución es otro ejemplar similar a las serpientes, pero es un lagarto sin patas, de cuerpo liso y alargado.
Distribución: este reptil se encuentra ampliamente distribuido en la región paleártica occidental, una zona zoogeográfica. Aproximadamente desde Europa occidental y central hasta la península de los Balcanes, con posibles poblaciones aisladas en Italia y Escandinavia occidental, señala ADW. Es un animal resistente, que se encuentra hasta en regiones cercanas al círculo polar ártico.
En cuanto a su hábitat, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), esta especie se adapta a una variedad de entornos, desde prados cubiertos de hierba hasta brezales, bordes de bosques, parques y jardines rurales. Se lo puede encontrar excavando en arena suelta y refugiándose debajo de rocas.
Reproducción y desarrollo: esta especie es ovovivípara, con hembras que dan a luz entre 3 y 26 crías, informa la UICN. Los adultos pueden alcanzar una longitud corporal de 40 a 45 centímetros, señala la Enciclopedia Britannica.
Comportamiento: este animal depende en gran medida de señales olfativas que utiliza para detectar presas, identificar congéneres y evitar depredadores, explica la base de datos estadounidense. Las feromonas juegan un papel crucial en su comunicación porque les permite determinar el sexo de otros individuos de su especie.
Alimentación: el lución es carnívoro. Su dieta se compone principalmente de caracoles, babosas, lombrices de tierra, entre otros invertebrados de cuerpo blando. Ocasionalmente, algunos vertebrados, indica Britannica.
2. Parece serpiente, pero es un anfibio: conoce a las cecilias
Las cecilias son miembros del grupo Gymnophiona, uno de los tres órdenes principales de anfibios modernos. Estos animales carecen de extremidades y fácilmente se pueden confundir con serpientes o gusanos.
Poseen un cuerpo pálido y anillado de aproximadamente 50 centímetros de largo, sin extremidades. Su apariencia es húmeda y resbaladiza, con un par de ojos diminutos, apenas perceptibles, y una boca provista de numerosos dientes delgados y afilados, según describe el Instituto Nacional de Ecología (Inecol) de México.
Su piel es lisa, desprovista de escamas, pero repleta de glándulas, algunas especializadas en la producción de toxinas y sustancias antimicrobianas.
La piel de las cecilias es lisa, sin escamas, pero repleta de glándulas, algunas de las cuales están especializadas en la producción de toxinas y sustancias antimicrobianas.
Distribución y hábitat: según la Enciclopedia Britannica, las cecilias se distribuyen en zonas tropicales de todo el planeta. De las 10 familias conocidas, 5 se encuentran en América.
Importancia ecológica: de acuerdo con el Instituto Nacional de Ecología de México, las cecilias desempeñan un papel crucial en los ecosistemas. Contribuyen a los ciclos de nutrientes tanto en medios terrestres como acuáticos, airean el suelo y forman parte de la cadena alimentaria como depredadoras y presas.
Comportamiento y adaptaciones: estos anfibios fácilmente confundibles con serpientes son mayormente nocturnos y muchas especies viven bajo tierra, aunque también se conocen especies acuáticas y semi-acuáticas. A pesar de tener ojos y oídos poco desarrollados, asegura el Inecol, poseen un sentido del olfato altamente desarrollado y un tacto sensible a las vibraciones. Estas habilidades les permiten comunicarse, detectar amenazas y encontrar presas.
Alimentación: en cuanto a su dieta, las cecilias son carnívoras. Consumen lombrices de tierra, termitas, chapulines y hormigas.
3. Los secretos de la lagartija topo mexicana
La lagartija topo mexicana, conocida científicamente como Bipes biporus, se encuentra exclusivamente en la Península de Baja California, en México, y puede ser fácilmente confundida con una serpiente.
Como vive bajo tierra, este animal evita a muchos depredadores que atacan a los reptiles, como las aves, por ejemplo.
Hábitat: de acuerdo con la UICN, esta especie fosorial (que vive en galerías que excava en la tierra o el fango) requiere zonas con suelos arenosos y con abundante hojarasca, rara vez es vista en la superficie. Prefieren hábitats de tierras secas y desérticas, con vegetación arbustiva seca. Construyen elaborados sistemas de madrigueras, justo debajo de la superficie.
Características: la lagartija topo mexicana se caracteriza por tener una cabeza pequeña y osificada, y un cuerpo cilíndrico cubierto de escamas dispuestas en anillos verticales, describe ADW. Los individuos más jóvenes son principalmente de color rosado y se vuelven blancos al madurar.
Comportamiento y adaptaciones: por lo general, añade la base de datos de la Universidad de Michigan, estos lagartos pasan las horas más frescas de la mañana cerca de la superficie del suelo y se retiran a la profundidad a medida que la temperatura ambiental aumenta a lo largo del día. Tienen una notable capacidad de termorregulación, lo que les permite estar activos durante todo el año en climas cálidos.
Alimentación: Bipes biporus es un carnívoro oportunista que se alimenta de una variedad de presas, incluidas hormigas (y sus huevos), cucarachas, termitas, larvas de escarabajos y otros pequeños invertebrados.