
Aunque usualmente para formar un arcoíris el sol se mezcla con una lluvia tenue, la bruma de una catarata provoca el mismo efecto, como en las cataratas Victoria en Zimbabue, uno de los Patrimonios de la Humanidad de la UNESCO. El río Zambezi llega al borde del acantilado sin tomar velocidad y otorgando una fina capa de bruma y bramido majestuoso que se gana el nombre de “El vapor que truena”.
En su mayoría, los arcoíris son semicírculos, pero una vista desde el aire les permite a los espectadores ver el círculo completo. Este arcoíris a lo largo de la frontera norte del parque nacional El Gran Cañón, Arizona, durante una tormenta ofrece una pista de la extensión completa de su arco.
El velo de bruma de estas majestuosas cataratas es el escenario perfecto para estos cazadores de arcoíris, como se muestra en esta foto estremecedora de las cataratas de Iguazú en Brasil. Las cataratas del Iguazú, que son tres veces más grandes que las de Niagara en América del Norte, se componen de alrededor de 275 cataratas más pequeñas e independientes que cruzan las cumbres rocosas encima del acantilado.
El verano y el comienzo del otoño son, en general, buenas épocas para encontrar arcoíris en áreas cerca de la cuenca del Mediterráneo. Aquí, una pequeña muestra de las bandas coloridas parece descender de una nube hacia Montjuïc, en Barcelona.
Un buey almizclero, uno de los mamíferos más antiguos del planeta, explora las pendientes cubiertas de nieve de Sør-Trøndelag, al este de Noruega, mientras que, detrás de él, un arcoíris parcial brilla contra la inmensidad de la nieve.
Los arcoíris dobles se dan cuando la luz se refleja dos veces dentro de las gotas atmosféricas y el resultado son dos reflejos en diferentes ángulos; esto significa que los arcoíris de afuera son más borrosos y están al revés. En esta imagen, los dos arcos se encuentran en un cielo sombrío por encima del inhóspito suelo de la autopista Puddley Valley en Utah.
En el parque nacional Forollhogna en Noruega, la nieve, el hielo, la bruma y los distantes picos de montaña ofrecen una vista dichosa que se vuelve más mística con el efímero brillo del arcoíris.
En una playa de Honolulú, quienes se encuentran allí intentan capturar un arcoíris cada vez que logra verse entre las nubes tormentosas. Dadas las condiciones geográficas y meteorológicas de Hawái, los arcoíris son comunes, incluso se ven en las matrículas de los automóviles de la isla.
Los leones— y también las cebras, los hipopótamos, los ñús y muchos otros animales— deambulan por la reserva nacional Maasai Mara en el sudeste de Kenya. Esta gran reserva cinegética es particularmente popular para la gran migración de ñús durante el verano y principios del otoño.
Incluso en verano, las temperaturas alcanzan niveles justo por encima del congelamiento en Prudhoe Bay, Alaska, en la comunidad más septentrional del continente norteamericano. Algunos turistas llegan a las zonas más grandes de tundra salvaje, ahora disminuidas por el desarrollo de la gigante Prudhoe Bay Oil Field.
Designada como lugar escénico nacional por el Departamento de Transporte, la autopista Kancamagus cruza el bosque nacional White Mountains en New Hampshire, y les ofrece a los viajantes vistas naturales sorprendentes, una historia rica y senderos de alpinismo pintorescos.
El camino Lough Salt en Donegal, Irlanda, es un camino rural recto que recorre las costas del oeste de Salt Lake antes de llegar al Atlántico.
El monumento nacional Bears Ears en el sudeste de Utah recibe el nombre por dos colinas escarpadas y sagradas para las tribus de la región. Estos terrenos fracturados, donde los ganaderos han hecho pastar su ganado durante generaciones, son sujeto de disputa reciente por las políticas que establecen la extensión y el uso de las tierras públicas.
En el este de Brasil, el parque nacional Chapada Diamantina es una reserva natural de proporciones épicas que ofrece vistas naturales hipnóticas, entre ellas, cuevas, la catarata Fumaça y la piscina de aguas negras Diablo.
Los dramáticos paisajes de los Fiordos del oeste en Islandia proporcionan un marco sorprendente para la repentina aparición de un arcoíris. Ha sido una de las zonas más aisladas de la isla por siglos, y los acantilados irregulares, las piscinas geotermales y los encantadores pueblos de pescadores atraen a los aventureros cada año.
En los meses de invierno, miles de ballenas migran desde Alaska a Hawái, donde las aguas cálidas ofrecen un hábitat ideal para el apareamiento y el alumbramiento. En 1992, con el fin de proteger a las jorobadas, el congreso creó un santuario marino en las principales islas hawaianas.
Sliabh Liag tiene algunos de los acantilados marinos más grandes y espectaculares de Irlanda. Una ruta costera en Donegal también ofrece vistas sorprendentes del océano Atlántico, las montañas Sligo y la bahía Donegal.
Cerca de las pendientes del majestuoso monte de Kilimanjaro, ol Donyo Lodge se posa sobre el terreno ondulado del parque nacional montes Chyulu en el sudeste de Kenia. Los elefantes, en su migración estacional, sobresalen contra el cielo tornasolado.
Cada primavera, casi el 80 por ciento de la población mundial de la grulla canadiense se reúne en el Platte, un importante río en Nebraska, antes de continuar su migración hacia el norte. El valle del río Platte constituye una pequeña porción crítica de hábitat en peligro en la ruta central norteamericana, la ruta de migración de aves que sigue a las Grandes Llanuras.
Uno de los fenómenos naturales más espectaculares de la Isla de Hawái ocurre cuando las copiosas cantidades de lava fresca se mueven hacia el océano, agregando nueva tierra y remodelando la costa en un proceso geológico de construcción de la isla.
Praderas florecientes y montañas verdes tiñen Broadford, el segundo establecimiento más grande de la Isla de Skye en Escocia. Reconocido por sus paisajes naturales prístinos, con sus cadenas montañosas, la región les da la bienvenida a los aventureros.