¿Cuáles son los tipos de autismo y cómo se diagnostica?
Actualmente, los expertos reconocen 3 niveles dependiendo de las particularidades de cada paciente.
Después de la escuela, una familia se reúne en la sala llena de juguetes y puertas donde los niños autistas pueden correr, rebotar y balancearse con seguridad
Para muchas personas, el concepto de autismo, también llamado Trastorno del Espectro Autista (TEA), puede parecer confuso.
La Revista Brasileira de Psiquiatria, de autoría de la psicóloga estadounidense Ami Klin, de la Universidad de Emory (Estados Unidos) y del psiquiatra brasileño Marcos Tomanik Mercadante, de la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp), define al TEA como una familia de trastornos de la socialización que afectan las relaciones personales, la comunicación, el aprendizaje y la adaptabilidad de los individuos a diferentes entornos.
Por su parte, el Ministerio de Salud de Brasil destaca entre los signos del autismo a las dificultades para comunicarse y socializar, la mala comprensión del lenguaje, la adopción de comportamientos restrictivos (por ejemplo, comer solo un tipo de alimento y rechazar los demás) y repetitivos (como moverse alguna parte del cuerpo sin detenerse).
¿Cuáles son los tipos de autismo?
Según la revisión n° 11 de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la actualidad, el autismo se divide en tres niveles según la necesidad que presente cada persona.
Nível 1 (considerado más leve)
- TEA sin discapacidad intelectual y con leve o nulo deterioro del lenguaje funcional;
- TEA con discapacidad intelectual y con deterioro leve o nulo del lenguaje funcional;
Nível 2 (moderado)
- TEA sin discapacidad intelectual y ausencia de lenguaje funcional;
- TEA con discapacidad intelectual y ausencia de lenguaje funcional;
Nível 3 (considerado más severo)
- TEA sin discapacidad intelectual y ausencia de lenguaje funcional;
- TEA con discapacidad intelectual y ausencia de lenguaje funcional;
¿Cómo se hizo el diagnóstico?
La sospecha inicial de que una persona tiene TEA suele darse en la infancia. “Por ser esencialmente clínico, la identificación de los rasgos del espectro autista se realiza a partir de observaciones del niño, entrevistas con los padres y aplicación de métodos de seguimiento del desarrollo infantil”, informa el Ministerio de Salud brasileño.
Una de las herramientas que se utilizan para ayudar al diagnóstico en las consultas es la cartilla de salud del niño, que proporciona información sobre lo que se espera que los niños sean capaces de hacer cuando alcancen una determinada edad.
A partir del cuadernillo, es posible identificar signos de TEA (como el bajo interés por socializar con otras personas, por ejemplo) y realizar un análisis más profundo.
A pesar de la existencia de múltiples materiales disponibles en internet sobre el tema, el diagnóstico siempre debe ser realizado por un médico especialista, quien evaluará al individuo y aconsejará sobre el seguimiento a realizar.
¿Qué es el síndrome de Asperger y por qué ya no se usa el término?
Durante mucho tiempo, las autoridades sanitarias entendieron el síndrome de Asperger como una "forma de autismo" de alto funcionamiento. Esto significa que los portadores presentaban dificultades similares a otras personas autistas, pero a un nivel muy reducido.
Sin embargo, la CIE-11 reunió todos los trastornos relacionados con el autismo en un solo diagnóstico: TEA.
Según la OMS, el cambio se realizó para evitar errores, simplificar la codificación y facilitar el diagnóstico. También existe un movimiento, entre la propia comunidad médica y las personas con autismo, para abolir el uso del término "Asperger".
Esto se debe a que el nombre hace referencia al médico austriaco Hans Asperger, quien colaboró con el régimen nazi y obligó a realizar experimentos en humanos. Debido a que estudió y escribió sobre el trastorno, terminó usando su apellido en la definición.
