Cacao, el fruto ancestral que ofrece un futuro prometedor
Para conocer la historia del cacao hay que hacer un viaje en el tiempo. El recorrido de este increíble fruto envuelve a los habitantes de Tabasco, México, quienes honran la memoria y la ancestralidad de un alimento que, además de tener beneficios para la salud, ofrece oportunidades para las familias. Gracias al Plan Cacao de Nestlé enriquecen su conocimiento para impulsar mejoras.
Para los mayas y los aztecas el cacao representaba mucho más que un alimento. Estas culturas milenarias lo utilizaban para preparar bebidas, como moneda de intercambio, y como símbolo de abundancia. Pero no solo las antiguas civilizaciones hacían uso del cacao. A través de la agricultura familiar los pobladores de Tabasco unen las raíces del pasado con el presente.
El xocoatl era una bebida producida por los mayas que, conforme a algunos textos, estaba dedicada a los dioses. De hecho, el nombre científico del árbol, Theobroma cacao, significa "alimento de los dioses" en griego. La bebida también solía dedicarse a algunos guerreros antes de las batallas.
Hoy por hoy, los agricultores de cacao de Tabasco toman una bebida llamada pozol. Muchos de ellos la cargan fría en sus termos y la beben durante la cosecha dado que les aporta mucha energía para el trabajo.
Además, para los mayas y los aztecas el cacao tenía valor de moneda. Era tan valioso que podría compararse con el oro. Paralelamente, los actuales productores cuentan que el cacao se vende muy rápido y que tener una parcela de cacao es como tener un cajero automático. De hecho, cuando venden su producción los cacaoticultores suelen decir: “Ya cayó el cacaíto” (el dinero que perciben por la venta del cacao).
La invaluable tradición milenaria de trabajar el cacao y de aprovechar al máximo el recurso perdura gracias a la agricultura familiar. Debido a que el conocimiento sobre su producción se transmite de generación en generación, tiene valor de herencia familiar.
El Plan Cacao de Nestlé reconoce su importancia y se propone darle impulso a la producción y fortalecerla. Específicamente, el proyecto ofrece asistencia técnica y capacitación en prácticas de agricultura a las familias de Tabasco. Además, catalizar mejoras significativas en sus condiciones de vida y elevar la calidad de sus cosechas.
A la sabiduría de los mayas y los aztecas y a la práctica agrícola familiar se le suma la presencia cada vez mayor de mujeres. Actualmente, 2240 productores participan en el esquema del Plan Cacao de Nestlé y el 25% son mujeres.
Sin duda la producción de cacao tiene una historia extensa que se enriquece con el paso de los años y que ofrece un futuro alentador para las familias tabasqueñas.
National Geographic Creative Works visitó a estas familias junto con el grupo agropecuario de Plan Cacao de Nestlé, para conocer de cerca su trabajo y compartirlo con el mundo. Disfruta de este contenido a través de una miniserie de 4 episodios que estarán disponibles a partir del próximo 20 de octubre.
