#NGXplorers: Diego Ponce de León

¿Cómo elegiste tu objeto de estudio?

Acabo de terminar mi doctorado en la Universidad de California Berkeley, estudiando Energía y Recursos. Elegí mi campo de estudio porque lo encontré como una manera muy eficaz de entrar de lleno en un tema que me llama mucho la atención que es el desarrollo de energía y sensores inalámbricos para realizar mejores mediciones y ayudar a reducir el gasto energético y de agua en aguas urbanas en Latinoamérica, particularmente en México y Nicaragua.

¿A qué te hubieras dedicado de no haber sido explorador?

Me dedicaría a hacer té kombucha que es muy rico y a surfear todo el tiempo.

¿Recuerdas alguna anécdota graciosa en tu trabajo de campo?

Sí, me acuerdo cuando estábamos instalando nuestros sensores en refrigeradores y freezers en Managua (Nicaragua). Trabajábamos con gente que tenía esos lugares llenos de carne congelada adentro. Cuando teníamos que quitar los sensores, estaban llenos de pedazos de carne y sangre, lo que resultó un poco “cochino”.

¿Cómo ves la realidad medioambiental dentro de 20 años?

Creo que vamos para adelante, tengo mucha fe en la gente joven. Tiene mucho más avance que las generaciones anteriores. Y si seguimos usando los medios para impulsar a los jóvenes vamos a llevarla muy bien, pero requiere el esfuerzo de cada uno de nosotros.

¿Cómo te ves vos dentro de 20 años?

Pues yo me veo contento, haciendo lo que me gusta, no veo haciendo un trabajo que no me gustara. Y, aunque la situación está difícil para el Medio Ambiente, también lo disfruto mucho.

¿Qué proyectos en relación a las energías renovables en América Latina son más interesantes?

Pienso que incorporar temas de transparencia y de contabilidad con los gobiernos e incluir a las comunidades marginadas es bien importante para los beneficios de energías renovables y sustentables se reflejen en toda la sociedad y no solo en las grandes compañías que invierten en ese tipo de proyectos.

¿Cómo se puede concientizar a la población sobre uso de energías renovables?

Lo tenemos que hablar en las comidas, en las cenas, con nuestros amigos, con nuestras familias, en las escuelas. Es un tema en el que todos podemos participar.

*Producción: Mariel Castro y Guadalupe Bengochea.